Una Auditoría energética consiste en realizar un estudio desde el punto de vista técnico y analizar el funcionamiento y la eficiencia de todos los elementos consumidores de energía de una empresa, edificio, fábrica, explotación agropecuaria, etc.

A partir de dicho análisis, se hacen propuestas encaminadas a mejorar la eficiencia energética de las instalaciones, es decir, mejorar el funcionamiento (o por lo menos conservarlo como está) reduciendo el consumo energético.

Además, siempre que sea posible, se plantea auto producir la energía que se consume o al menos obtener recursos energéticos más económicos que los que se están utilizando.